La manicura es un tratamiento de belleza cosmético para las manos, incluidas las uñas. Una manicura estándar consiste en limar, dar forma y pulir las uñas. El tratamiento de las manos en una manicura estándar puede incluir remojar en sustancias suavizantes y aplicar loción para las manos. Sin embargo, existen varios tipos de manicura especializada y la manicura de spa es una de estas manicuras especializadas. Una manicura de spa es más complicada y puede ser mucho más cara que una manicura estándar. Para los clientes, la manicura del spa se sentirá más lujosa y los hará muy especiales como regalías o celebridades.
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Una manicura de spa típica consiste en todo lo que proporciona la manicura estándar, pero con tratamientos adicionales como aplicar un exfoliante y un tratamiento de parafina. Una alternativa a estos tratamientos adicionales puede incluir una mascarilla para las manos en lugar del exfoliante o la parafina. Sin embargo, las manicuras de spa pueden ser diferentes de un spa a otro. Los clientes pueden obtener más información sobre las diferentes versiones de manicuras de spa consultando previamente las recepciones del spa o con los técnicos.
Un ejemplo del procedimiento en este tratamiento incluirá varios pasos como limpieza, humectación, exfoliación y cuidado de las uñas. Para empezar, las manos se lavarán con un limpiador revitalizante y se remojarán. Sigue un procedimiento para eliminar las cutículas rebeldes. Luego se crea un paquete de humedad para la placa de la uña y se masajea. Después de esto, los cristales exfoliantes se masajean en las manos y los brazos envolviendo las manos en toallas tibias para permitir que los cristales penetren.
Más tarde, cuando se quitan las toallas tibias, se limpian las manos con una toalla húmeda tibia, seguido de la aplicación y masaje de loción en manos y brazos. Luego, todos los pasos concluyen con una manicura completa, como en una manicura estándar. Si todo el proceso se realiza correctamente, siempre que se utilicen las manos con precaución, las uñas resultantes después de este tratamiento pueden durar hasta diez días o incluso más. Hoy en día, muchas personas dedican su tiempo a hacerse una manicura de spa porque unas manos hermosas y bien arregladas causan una impresión positiva en los demás y, al mismo tiempo, aumentan la confianza.
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